04 septiembre, 2007

Granada I: Tapeo

Este fin de semana, para el que no lo sepa, me he ido con el padre Horacio al reino de Granada. Ha sido uno de esos viajes tranquilos, de disfrutar el momento y no estresarse en ver monumentos (de los de piedra, se entiende) y sobretodo, un viaje para dejarse llevar por los sentidos, sobretodo por el del gusto: Que Tapas!!!! Esperando las fotos del viaje, voy a hablar de ellas (de las tapas).

Tras pecar de pardillos la tarde de nuestra llegada (pedimos una paella en restaurante-terraza cuyo tamaño resultó que casi no superaba el de un plato de café), pudimos degustar y disfrutar los manjares que se ofrecen con absoluta gratuidad e impunidad en la mayoría de baretos de la ciudad. Pidiendo una cerveza, cubata, sangría o una coca-cola, te ponen todo tipo de tapas, uno acaba bebiendo solo para comer, comer y comer, y es que no es casualidad que los últimos momentos del viaje los pasásemos imitando a Ángel Fernandez. Para el que no lo sepa, este es un ex-directivo del F.C.Barcelona conocido por su gran afición a la comida, y segun se rumorea, por haber protagonizado tres comidas de negocios en un mismo día, en tres restaurantes diferentes, y con tres representantes de jugadores diferentes, -jo dino tres cops si fa falta: tot pel barcelona- dijo él.

Pues como decía, granada=tapas, y mucho más que eso, claro, pero en este viaje: Tapas. El resumen podría ser este: Cerveza y Jamón Trevélez, cubata y roscas de lomo (y que lomo! tatuado y todo), cerveza y tortilla de patatas, rioja y patatas bravas, tinto de verano y minibocatas. Chorizo, salmorejo, boquerones, ensaladilla rusa, anchoas, aceitunas... un no parar, y así hasta que cierran.


Se dice que las tapas nacieron en España de la mano de Alfonso X el Sabio (Coño! El sabio! ahora entiendo el porqué de ese mote). Tras una grave enfermedad por la que debía tomar pequeños bocados entre horas acompañados de vino, prohibió que su pueblo bebiera en las tabernas sin comer, para evitar que los currantes desfalleciesen llenando el estómago sólo de alcohol. Pues bien, agradeceremos al tal Alfonso X su genial invento, parece que a veces sale algún rey útil, aunque sea de 300 en 300 años. Acabemos pues: Gracias y que aproveche!
Esta tapa es del Bar, la bella y la bestia, a juicio de Jordi y mio, el garito con los mejores "tapones" que probamos en Granada. Te los sirven por rondas, según el número de copas que te has tomado, te van poniendo una u otra tapa, pasando ronda mejoran la tapa, llegamos a la 4ª, creo, estoy seguro que si llegas a la final la camarera te sirve ese lomo que he mencionado antes y que tan buena pinta tenia -a buen entendedor...-.

1 comentario:

Anónimo dijo...

cuantísimos sitios has visitado! hace una semana tuve la oportunidad de probar el tapeo granaíno y he de reconocer que es el más generoso de la península